Lauren tiene una buena vida: buenas notas, amigos grandiosos y el novio que toda chica desea. Entonces ¿por qué es tan infeliz? A Lauren le toma la llegada de Evan Kirkland descifrar la respuesta: ella ha estado conteniéndose. Se ha estado negando así misma un montón de cosas (como el sexo) porque estar con su leal y hermoso novio, Dave, es lo ―correcto‖. Después de todo, ¿quien renunciaría al chico perfecto? Pero mientras Dave empieza a hablar mas y mas acerca de su vida juntos, planeando un futuro, Lauren simplemente no puede verse así misma en él—y mientras Lauren desea a Evan, y más aún a quien es ella cuando está con Evan, se vuelve todo mas difícil—Lauren se da cuenta de que necesita tomar una decisión…antes de que una sea tomada por ella.
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